Los Ángeles de la abundancia están para ayudarnos a atraer todo lo que queremos y nos beneficia, incluyendo aquello que pareciera imposible. Existe abundancia en todo, tanto en lo que queremos como en lo que no queremos. Así por ejemplo, si tú te enfocas en carencia, carencia obtendrás en abundancia. Aquí es donde estos angelitos nos ayudan para que nos enfoquemos en lo que es para nuestro mayor bien. Todo lo que necesitan es tu permiso y tu disposición.
Cuando queremos cambiar el tipo de prosperidad que estamos recibiendo, debemos estar dispuestos a dejar ir lo que ya no necesitamos o queremos. Cerrar ciclos de dolor, dejar partir a personas que ya cumplieron su propósito de estar a nuestro lado y dar la bienvenida con los brazos abiertos a todo aquello que el Universo tiene para nosotros.
Dicen los Ángeles que hay momentos que están muy enfocado a que descubramos nuestros talentos, pasiones e intereses y ponerlos al servicio de nuestra Misión de Vida. Así que trabajan mucho para que podamos reconocerlos y entonces sí la prosperidad nos rodea porque estamos en el camino que nos corresponde. Tú sabes que estás utilizando tus talentos cuando estás entusiasmado e inspirado haciendo lo que haces. Porque la palabra entusiasmo proviene del griego que significa “tener a Dios dentro de ti”, entonces para los griegos una persona entusiasmada era aquella que estaba guiada por la fortaleza y sabiduría divinas, y la palabra inspiración, significa estar en espíritu.
Entonces para comenzar nuevos ciclos con toda la abundancia, dicen los ángeles que pidas ayuda para que puedas reconocer estos talentos y ellos te mostrarán los objetivos, y así estés muy apagado o te sientas derrotado, ese objetivo tocará justo la parte más profunda de tu Ser, lo que te hará sentirte entusiasmado e inspirado.
Otro punto a reconocer es que el ego siempre se preocupará por la forma en que llegará la abundancia, quiere conocer todos los detalles manteniéndote desconfiado y temeroso. Consejo: deja que Dios y los ángeles orquesten el cómo, tú sólo ten claros tus deseos.
Cuando tú eres feliz, todo el mundo se beneficia. El dinero llega por consecuencia una vez que eres feliz en tu trabajo y ayudas a servir a otros. La verdad es que el mejor regalo que puedes dar a cualquier persona es el AMOR; el amor es un regalo que no tiene precio.
Aquí te dejo una tareita: Tómate un momento a solas para pedir ayuda a tus ángeles y pregúntate: ¿Qué cambios me gustaría hacer en mi vida? Respira y escucha la respuesta a través de tus sentimientos y pensamientos, ellos lo traerán a ti.
Los Ángeles de la Abundancia y yo te deseamos una feliz semana. ¡Te quiero!
Grisy Nava
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